viernes, 23 de mayo de 2008

POR UNA EDUCACIÓN PÚBLICA SIN RELIGIÓN

Que la asignatura de religión deje de formar parte del curriculo de Primaria, Secundaria y Bachiller es hoy una necesidad. Ya no se trata únicamente, de defender la aconfesionalidad del Estado eliminando cualquier tipo de enseñanza religiosa de la Educación Pública Española . Hoy en día nos faltan horas de matemáticas y ciencias, de lenguas y filosofía , de educación física y artística. La solución no pasa por aumentar el horario lectivo de los alumnos, los saturaríamos. De lo que se trata es de conseguir que la jornada lectiva sea lo más productiva posible. No podemos seguir permitiendo que la asignatura de religión impida a nuestros hijos avanzar en el currículo. De hecho, todos aquellos que no optan por religión no pueden avanzar materia de otras áreas obligatorias en el currículo en el horario de dicha asignatura. Es el momento de dar un paso hacia delante y eliminar la religión de la Educación Pública. Ya no tiene sentido. No se justifica desde ningún punto de vista.
Los valores cristianos son valores universales que están perfectamente integrados en el currículo a través de los temas transversales y de la nueva asignatura de Educación para la ciudadanía, asignatura obligatoria para todo el alumnado de Secundaria y Bachiller.

Publicada en "La Voz de Galicia", Cartas al director el 26-05-08.
Publicada en "El País", Cartas al director del día 26-05-08, con el título Religión y Educación para la Ciudadanía.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Estoy totalmente de acuerdo en que la religión es algo que no debe restar horas a la educación de nuestros hijos. En el mundo laboral, la religión no hace falta, pero si se les pide la física, las matemáticas y sobre todo las lenguas.
Utilicemos esas horas en algo más productivo, como enseñar a nuestros hijos lo que les va a valer el día de mañana, lo que realmente importa, que es el aprendizaje para la vida, para su futuro.
Por qué el Estado puede influir en la educación religiosa de nuestros hijos, si no lo desean sus padres, dado que no todo el mundo entiende la religión de la misma manera?

Anónimo dijo...

Suprimir la religión de la educación, sería acertado o precipitado. Yo me quedaría con lo segundo, porque arrebatar el derecho de conocer las creencias que nos guiaron por el buen camino? Que sería de muchos pueblos sin la ayuda de la religión católica? No es cierto que es la Santa Iglesia la que da equilibrio a este desorden sin control guiado por el libertinaje? Que seria de este mundo sin la fe en Dios y en la Santa Iglesia, a quien rezaríamos ante tanta injusticia y hacia donde alzaríamos la mirada en los malos momentos.
Mas que suprimir ampliar la educación, pues luego nos espera un largo y duro mundo laboral, aumentemos el calendario escolar y asi enriqueceremos mas la cultura de nuestros hijos. No echemos la culpa del actual fracaso escolar a una asignatura; profesores, hay que aumentar el horario escolar y disminuir el calendario vacacional, en el aprendizaje no puede haber puentes ni tantos festejos y desde luego no entiendo como una profesión tan importante como la de educador dispone de más días libres y más vacaciones que cualquier otra.
Como conclusión padres y profesores tienen en sus manos solucionar los problemas actuales, los segundos trabajando más y los primeros preocupándose por sus hijos y respetando el trabajo de los profesores.
No creo que una asignatura con tan baja participación en el calendario escolar sea una piedra en el camino de la enseñanza

Anónimo dijo...

Entiendo tu punto de vista aunque no lo comparto. En ningún momento he dicho que la enseñanza religiosa no sea importante, sólo he dicho ya no tiene sentido en los colegios públicos. Ocupa un tiempo necesario para trabajar otras materias obligatorias e impide que los alumnos que no asisten a la asignatura de religión avancen materia en ese tiempo (ya que no está permitido).
Los problemas de los pueblos no no se arreglan rezando, se arreglan actuando directamente contra las injusticias y viviendo cada día en base a los principios cristianos que comparten otras religiones y que son asumidos como universales.
Me pregundo a quién rezaron los millones de católicos italianos ante la gran injusticia cometida contra la inmigración en su país?
El silencio del rezo no frena las injusticias que cometen los hombres desalmados.
Por otro lado, considero que el horario lectivo de los niños es sufiente. Sobrecargarlos no es el camino para que aprendan más y mejor. Necesitan tiempo libre para relacionare, leer, escuchar música y realizar actividades artística y deportivas.